Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,38-48):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus
discípulos: «Habéis oído que se dijo: “Ojo por ojo, diente por diente.”
Yo, en cambio, os digo: No hagáis frente al que os agravia. Al
contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra;
al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también la
capa; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a
quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehuyas. Habéis
oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo” y aborrecerás a tu enemigo. Yo,
en cambio, os digo: Amad a vuestros enemigos, y rezad por los que os
persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que
hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e
injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No
hacen lo mismo también los publicanos? Y, si saludáis sólo a vuestros
hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los
gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es
perfecto.»
Palabra del Señor